Amor perdido, amor fallido, amor extinto, quiero dedicarte estas palabras, las últimas que serán para ti.
Cuando te fuiste, existieron muchas cosas que jamás dije, que no quisiste escuchar, pero como ahora estoy lista para decirte adiós, para cerrar nuestro capítulo, y seguir adelante y lo último que me falta es escribirte todo lo que no te dije y quisiera que supieras.
Tengo muchas cosas que agradecerte, llegaste a mi vida sin pensarlo, mucho menos sin buscarlo, poco a poco, fuiste ganándote mi corazón, mis pensamientos, todo; sin darme cuenta, ya no podía tenerte lejos, quería ver tus ojos, sentirte cerca de mi. A tu lado hice cosas que no creía que las haría, vivimos tantas cosas juntos, rompimos las reglas juntos y lo mejor de todo era que no nos importaba; no nos importaba nada, mientras nos tuviéramos no nos importaba dormir, faltar a trabajar, viajar estando juntos sin necesidad de ir a otra ciudad. Tener la sensación que cuando estábamos juntos nada más importaba, sentirme tan bien en tus brazos, con tus besos, todo con el simple hecho de tenerte a mi lado.
Cuando decidiste alejarme te juro que una parte de mi se rompió, no volvió, ni creo que volverá.
Sí, me arrepentí de tal vez no mostrarte de muchas maneras lo que sentía y lo que significabas para mi, pero no lo sé, comenzaba a sentirme tan atrapada en una relación que no sabía que significaba, que existía, que era y que no era real.
En fin, también quiero agradecerte por eso, por renunciar a lo nuestro, porque gracias a eso, encontré a alguien que no sé cansa, que no se va a la primera de cambio. Teníamos tantos planes para nosotros, tantas cosas que viviríamos juntos, que todo sé quedo en eso, en simples palabras.
Solamente no quiero que dudes de lo que yo sentía, de que fue verdad, me llegué a enamorar de ti, quería vivir contigo muchas cosas, estar juntos todo el tiempo posible, en fin, amor perdido, gracias por llegar a mi vida, recordarme lo que era el amor, la felicidad de pareja, pero al mismo tiempo, gracias por recordarme lo que era sufrir, tener el corazón roto, desilusionarme de las personas, y el recordarme que tarde o temprano volveré a recuperarme, volveré a recuperarme, volver a intentar ser yo.
Tampoco olvides que una parte de mi se fue contigo, pero como el viento se lleva algunas cenizas del ave fénix, que a pesar de eso, ella aún resurge.